XI Festival Danza en la Ciudad
Fecha de función: 14 de noviembre de 2018
Teatro Jorge Eliecer Gaitán
Por Andrea Alvarado
La noche del 14 de noviembre retumbó la ciudad con gritos de fraternidad. Un gigante emergió desde las profundidades de aquel escenario que vibraba en un ir y venir de conmoción y asombro. Era la noche de inauguración del XI Festival Danza en la Ciudad, en la que convergieron más de mil espectadores, que completaron el aforo total del emblemático Teatro Jorge Eliécer Gaitán.
El Festival, que en este año lleva como slogan Diálogos en Movimiento, integra a las comunidades entorno a las diversas expresiones estético-políticas de la danza a nivel nacional e internacional, y este encuentro inaugural dio cuenta no solo del gran talento y dedicación de los artistas, sino de la cohesión del sector, dejando por lo alto a la danza en Colombia y la intensiva labor de sus gestoras, entre ellas Juliana Atuesta, Directora Artística del evento de inauguración; y Natalia Orozco, Gerente del Área de Danza del Idartes.
La fuerza del flamenco se entremezclaba con la magia de la danza clásica. El deleite de energía de las tradiciones de los pueblos inundaba el espacio a la vez que se hacía presente la vanguardia de la danza contemporánea colombiana. Estos y otros géneros se unían en un tejido poderoso de su historia grabada en la piel. Artistas reales, seres humanos de carne y hueso que día a día, con sangre, sudor y lágrimas lo dan todo por el honorable oficio de la danza, una profesión que requiere de perseverancia y agallas. Es el orgullo de danzar como una república de cuerpos en un contexto de violencia y desesperanza: cuerpos que se resisten al olvido, a la dominación de la ignorancia, al silencio.
El evento fue exposición de algunos de los proyectos que se han venido adelantando desde las políticas culturales de la Gerencia de Danza como lo es La Compañía Joven de Danza Crea, en la que niños y jóvenes becarios hicieron una impresionante reposición de la icónica pieza La Consagración de la Primavera. También es de resaltar la participación de Archivo Vivo, un proyecto que ha reunido a maestros creadores mayores de 50 años, cuya experiencia ha marcado generaciones de bailarines, directores y docentes. Ver a personalidades como Álvaro fuentes, Guentcy Armenta y Alberto Lozada, compartiendo su historia como libros abiertos de la danza fue sin lugar a dudas uno de los momentos más conmovedores de la noche, pues permitió un encuentro intergeneracional que cimienta la articulación de los más jóvenes con la memoria viva del arte del movimiento.
Se rindió un especial homenaje a la maestra Martha Isabel García Moreno, quien nos cautivó con su Amor Puro, y a quien se reconoció por sus décadas de trayectoria en la dirección de Danzas Puerta del Sol, un espacio que ha sido epicentro del desarrollo integral de artistas en el país. La maestra ofreció un breve discurso acerca de la importancia del compartir y no competir en la comunidad de la danza, y citó a Eduardo Galeano con la frase “Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas puede cambiar el mundo”.
Todo culminó con una fiesta de alegría y furia donde se sintió el clamor de los artistas hijos de la universidad pública. Con gallardía, los cuerpos gritaban “aquí estamos, en pie de lucha por la educación pública y de calidad”. Un sector, que lucha y resiste en medio del ambiente sombrío que le rodea, demostró que se mantiene hoy más sólido que nunca. Con este evento se da inicio oficial a este mega festival que transformará a la ciudad durante las próximas semanas.
